![](https://static.wixstatic.com/media/fbdbb3_266ef153f21143758734469981ff4db1~mv2.jpg/v1/fill/w_800,h_600,al_c,q_85,enc_avif,quality_auto/fbdbb3_266ef153f21143758734469981ff4db1~mv2.jpg)
Muchos debaten se forman en torno a la posición que tiene la iglesia de cristo frente a ciertos temas que no coinciden o no forman parte de lo que nosotros creemos y defendemos, temas que derechamente cuentan con nuestra desaprobación (o mejor dicho la desaprobación de Dios mismo según lo que creemos y conocemos de Él) y que pareciese poner en tela de juicio la principal virtud de Dios, y también la más conocidos por creyentes y no creyentes, El amor de Dios.
Pareciese ser que el “amor” de Dios nos imposibilita de estar en contra o de declarar estar en contra de cualquier tema polémico a nivel social.
Muchas han sido las veces que he leído comentarios en temas de esta índole donde la gente no creyente ocupa la frase “¿no se supone que su dios es un dios de amor?” como argumento para anular algún desacuerdo que expresa algún creyente.
Cristo deja bien establecido un parámetro clave del amor en juan 13:34:
“Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.”
Sin duda la preocupación de Jesús estaba puesta en que entendiéramos lo importante que es amarse mutuamente, pero Jesús sabía que el parámetro de amor que manejamos como seres humanos es demasiado imperfecto, entonces deja estipulado la frase “como yo os he amado”, dándonos a entender que su amor es muy diferente al nuestro, ahora, en juan 3:16 dice:
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna.”
Ya establecimos que el amor de Dios es diferente al nuestro, ahora ese amor tiene una condicionante para hacerse presente en la vida de una persona, dice “para que todo aquel que en él crea”.
Aquí encontramos el meollo del asunto y la desacreditación del argumento usado por el mundo sobre el amor de Dios, si no crees en Dios ¿Cómo puedes pretender entender su amor que no es igual al nuestro?
Si el amor de Dios fuese como el nuestro estaríamos en el constante peligro de que Dios se aburra de nosotros y deje de amarnos en cualquier momento, pero su amor no es así (gracias a Dios) es mucho más profundo, y el creer en Jesús como nuestro salvador no lleva irremediablemente a buscar agradarle, aprender de Él y conocerle, no se puede pretender usar el amor de Dios como argumento si no estamos dispuestos a creer en Él y a vivir para Él, simplemente no se puede.
El amor de Dios no solo nos ha salvado, nos guía constantemente por su camino que en muchas ocasiones no es el mismo del mundo, no puedes entender el amor de Dios sin estar dispuesto a caminar su camino, porque encontraras que es más profundo y demandante, pero los que le hemos conocido estamos dispuestos a ser formado por el verdadero amor de Dios, el amor que es Dios.